Puedo ver tus manos recorriéndole la espalda y asiéndote a sus brazos como si fueran el último sorbo de vida. Trago, no sé si el hielo o el último sorbo de la mandrágora que cultivo sólo para ti. Me dan arcadas. El vómito me cosquillea la traquea como él pelliza tu piel por debajo de la camiseta y sé que si cierro los ojos caeré de la silla con el peso de vuestros cuerpos engarzados como bisutería barata. No consigo entender que hago aquí, con la mirada vacía porque ya no sé llorarte más, tragándome a espuertas el cemento que funde vuestros cuerpos a unos metros de mi vacío.
¿Qué es lo que hay que hacer para olvidarte?
.
.
Sonando: "Cadillac solitario" de Loquillo y los trogloditas
Foto: Sherezade
Entrada más reciente Entrada antigua Inicio
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
pqueno dijo...
si encuentras ese manual para el olvido, avísame
preciosa foto (y preciosa canción)
abrazos elípticos desde el norte
8:50 p. m.
Elena -sin h- dijo...
Dejar de intentarlo
12:00 a. m.
Anónimo dijo...
No pensar en el olvido?...
1:04 p. m.
Cle dijo...
El olvido, al igual que enamorarse o tener fe, son de esas cosas q cuanto más intentas, menos consigues o sea que supongo que uno sólo puede dejar pasar el tiempo y a ver qué sucede.
2:38 p. m.
Para, creo que voy a vomitar dijo...
Nada.
6:19 p. m.
el_hombre_que dijo...
correr
12:34 p. m.
alZhu dijo...
Quizá no haya nada que hacer...
Precioso post.
5:43 p. m.
Anónimo dijo...
Es posible que puedas aprender a vivir simulando haberla olvidado. Hasta puede que un día empieces a creértelo tú mismo. Sea como fuere, si lo descubres, avísame.
2:56 a. m.